|
Revista
Premiere, Estados Unidos, octubre 1999
Dos chicas
"Atrapadas
sin Salida"
En Inocencia Interrumpida, Winona Ryder y
Angelina Jolie presentan una película para chicas diferente: la historia real de una
mujer que se despide de la adolescencia en un manicomio.
La joven actriz que cuelga del techo de un baño en
Pennsylvania, con las muñecas cortadas y los ojos abiertos, supuestamente está muerta.
Aunque estuvo colgando de un arnés en una posición bastante incómoda durante varias
horas, la actriz tuvo un problema aún peor: Winona Ryder actuando en esta escena, frente
a ella, era demasiado convincente. Cada vez que Ryder entraba al baño y horrorizada
descubría a su amiga colgando
la "muerta" no podía evitar el llanto.
Nadie imaginó que "Inocencia
Interrumpida", basada en el best seller de Susanna Kaysen sobre sus
memorias en un manicomio a fines de la década del 60, perturbaría a por lo menos una de
las actrices.
Se había comentado que al reunir a tantas mujeres
talentosas como Ryder, Angelina Jolie, Vanessa Redgrave,
Whoopi Goldberg y las novatas Brittany Murphy, Elisabeth Moss y Clea
Duvallla filmación sería muy hormonal y estaría impregnada de mucha
competitividad ; pero ni siquiera las actrices pudieron imaginarse lo que iba a suceder:
que pudieran involucrarse en la historia de una manera inusual, y las
gratificaciones que recibirían por ello.
La escena del suicidio- una de los momentos más
duros y tristes de la película- se terminó de filmar el tercer día de rodaje, y esta
escena marcaría el clima de la película durante 12 semanas.
Ryder, que interpreta a Kaysen,
una adolescente en medio de una gran depresión, se metió en la piel de su personaje en
el invierno, y no lo abandonó hasta llegada la primavera, cuando terminó el rodaje.
De manera similar, Angelina Jolie que
interpreta a Lisa- una carismática sociópata sin corazón, con la cual Susanna
queda fascinada- también decidió dedicarse por completo a su personaje y reclutarse en
el set de filmación. Ambas mujeres parecen haberse entregado por completo a la
historia y ahondado en sus propios fantasmas.
Al principio, Hollywood no se interesó en la
historia de "Inocencia Interrumpida", un diario básicamente oscuro -
pero gracioso- , sin argumento y con personajes femeninos muy
difícilesanoréxicas, catatónicas y suicidas. Pero a Ryder, este libro - que
recibió de manos de su padre, el escritor Michael Horowitz, cuando tenía 21 años- la
tocó muy de cerca. La actriz tuvo ataques de ansiedad durante años, y uno de las peores
cosas que este problema le trajo fue el hecho de no poder explicar qué le sucedía a los
que la rodeaban: a sus hermanos, amigos, ni siquiera a su terapeuta. Pero sí encontró
consuelo en el libro bellísimamente escrito por Kaysen -el primero que leyó después de
"Darkness Visible" de William Styron, que hablaba abiertamente sobre
"qué es sentir que uno se está volviendo loco", dice. Para Ryder ningún
libro había descripto tan bien ese "pozo" en el que a veces caen las
adolescentes.
"Nunca fui suicida", dice Ryder, sentada a
una gran mesa debajo de una sombrilla aún más grande en Los Angeles. Detrás, se
ve una puerta abierta de una casa de dos cuerpos y a su izquierda, una inmensa piscina.
"Pero algunas veces, definitivamente, pensé: soy demasiado sensible para este mundo
en este momento, sencillamente no pertenezco a este lugar- todo es muy rápido y no lo
comprendo; en esa época me hubiera gustaba invernar; pero no hubiera sido
saludable, me hubiera quedado muy sola y me hubiera sentido muy inútil".
Ryder tiene puesta una remera beige, su pelo es
oscuro y tiene mechitas rubias. Es más encantadora personalmente que en
pantalla, inclusive parece más frágil y sencilla.
"Estuve internada en un hospital psiquiátrico
cuando tenía 19 años", y continúa evocando el período de su adolescencia cuando
ya era una veterana del cine - había filmado nueve películas, incluyendo "Mi
mamá es una sirena" y "Heathers" - "la verdad pensé
que me estaba volviendo loca, siempre fui insomne, pero estaba trabajando muchísimo,
estaba muy cansada y no podía dormir. Pensé que estaba sufriendo un colapso nervioso y
me interné voluntariamente. No sé cuánto tenía que ver con mi adolescencia y con
lo que me estaba pasando interpretar a otras personas".
Ryder se internó en un verdadero hospital
psiquiátrico en 1990, no en un hotel para ricos y actrices famosas, y tuvo miedo. Se fue
del lugar una semana después, sin que la pudieran ayudar: "No sabía si debía
contarlo", dice tímidamente, bajando la cabeza y llevando su hombro a la oreja,
"pero es verdad, no me da vergüenza decirlo. Pienso que todos pasamos por estos
períodos en nuestra vida...".
A los 21 años , Ryder deseaba más que nada
interpretar a Susanna Kaysen. Pero cuando quiso comprar los derechos del libro, se enteró
de que el productor Douglas Wick (Secretaria Ejecutiva) se le había
adelantado (Columbia Pictures no había querido comprarlos aunque sabía que
todas las actrices jóvenes que pasaban por el Estudio llevaban el libro debajo del
brazo).
Fue así que Ryder llamó a Wick y le dijo que
quería sumarse al proyecto. Con la joven actriz en el protagónico (además de
productora ejecutiva de la película), Columbia Pictures se interesó
inmediatamente. Ahora Wick estaba en condiciones de buscar un guionista y un
director.
Pero ese proceso le llevaría cinco años - tres
escritores trataron de hacer el guión, y varios directores presentaron sus ideas, pero
ninguno lograba identificarse con el proyecto; hasta que Ryder vió "Heavy"-
una película independiente sobre un cocinero obeso y tímido, que se enamora de una chica
que nunca podrá tener - y conmovida, se puso en contacto con el joven escritor y
director James Mangold, que en ese entonces estaba trabajando en
su segundo film, ya no tan independiente- "Tierra de Policías (Copland).
A Mangold (casado con la productora de "Scream"
Cathy Konrad, también productora de Inocencia Interrumpida) no
le gustaron las adaptaciones que Ryder le había enviado, pero la actriz lo conmovió, ya
que le habló durante horas sobre su joya más preciada: su primera película.
Mangold logró conectarse con los temas que
planteaba el libro de Kaysen: " se trata de un misterio", dice, "sobre
preguntas como ¿qué me pasa?, ¿quién está loco y quién no?, esas preguntas son
bastante atrapantes para cualquier lector, sea hombre o mujer, porque todos tenemos
momentos en los que nos preguntamos eso", dice Mangold.
Después de finalizar la película Tierra de
Policías, su "oscura endecha masculina", Mangold estaba ansioso por
dirigir a un elenco femenino. No quería hacer sólo una película sobre " un grupo
de chicas lindas con chalecos de fuerza, sino una película con mujeres que tuvieran
"ovarios". También sabía que la película necesitaba valerse por sí misma,
tenía que tener un mensaje, y no tenía que ser una copia de Atrapado sin Salida
o Despertares.
Al poco tiempo, Mangold leyó un ensayo de Salman
Rushdie sobre el Mago de Oz, y le pareció que el viejo musical de la MGM
sería perfecto como telón de fondo para la historia de Susanna Kaysen: Una joven
atrapada en una vida monótona, enfrentada con sus padres, es secuestrada por un
tornado y lanzada a un universo paralelo donde todos se comportan como chicos y han
perdido una parte de sí mismos. Sólo que cada una de esas personas piensa que no
hay nada extraño en ellos, aunque íntimamente saben que no es cierto.
Mangold comenzó a hacer la adaptación del libro y
durante un año le fue mostrando el material a Ryder. "Lo
consiguió", dice la actriz, refiriéndose a la historia con la cual ella tanto se
había relacionado. "Muchos no pudieron lograrlo, pero él hizo una película
hermosa. Respeto mucho a los directores con los que he trabajado, gente como Martin
Scorsese, - que fue unas de las mejores experiencias de mi vida, pero quizás ahora que
soy más grande - Ryder tiene 28 años actualmente- Jim me trató como su socia durante la
película, nunca fue condescendiente conmigo
" , dice mientras mira con
vergüenza a lo lejos. "Es un gran socio y amigo".
Fue Ryder quien sugirió a Angelina Jolie
para el personaje de Lisa, después de haberla visto en su magnífica actuación
en la película de HBO: Gia. Lisa era una "bomba de tiempo", según
Konrad, " que explotaba en las escenas con Winona"; Magnold dice que se había
imaginado una especie de "Jack Nicholson con pollera" cuando escribió el
personaje. Y aunque muchas jóvenes actrices de Hollywood hubieran hecho cualquier cosa
por interpretar ese papel trangresor y explosivo y de esa manera poder lucirse-,
dice Mangold ninguna de las actrices que audicionaron pudo darle vida a Lisa, hasta
que llegó Jolie.
"Angie llegó un día", dice Mangold,
" se sentó, y ya era Lisa. Me sentí el hombre más feliz del mundo".
Cuando Jolie (24 años), después de quedar
seleccionada para la película, fue a buscar el libró de Kaysen a su biblioteca, se dio
cuenta de que todo lo que había subrayado previamente, era sobre Lisa; ya se había
identificado con esa chica.
"Uno de los pasajes del libro presenta a
Lisa", dice Jolie, sentada en un bar de cigarros en Los Angeles, con una gran copa de
vino tinto en su delgada y huesuda mano, " sus ojos salvajes habían visto la
libertad". Jolie no sonríe, pero muestra su brillante
dentadura
y mirando hacia un costado, dice: " Me hice un tatuaje con una frase
de Tennesse Williams", y levantando su brazo extremadamente delgado y remangándose,
muestra el tatuaje con la frase en letras negras- la cual lee:
"Una plegaria por los salvajes de corazón encerrados en jaulas",
esa es Lisa, y esa soy yo", dice, " eso fue lo que me encantó".
Jolie dice que generalmente no es una persona sociable en los sets de filmación, pero al
vivir la carismática vida de Lisa, - una sociópata "busca pleitos"- se
encontró, sin embargo, con que su trailer siempre estaba lleno de gente. La actriz ponía
música a todo volumen, tenía una tabla para jugar a los dardos y animales hechos con
globos, y junto con algunas chicas de la producción recortaban fotos de revistas
pornográficas y las pegaban en las paredes del trailer. Jolie invitaba a los
"transpo" (los muchachos de transporte) a que la ayudaran a recortar fotos.
"Lisa se deja llevar completamente por sus
impulsos", dice la actriz. "Está muy enojada con la gente porque no se
permiten ser ellos mismos, porque viven con máscaras, enamorados de sus problemas y
ella quiere hacerlos reaccionar. Este personaje me permitió ser muy libre" dice
sonriendo , y saca un cigarrillo de un paquete casi vacío para encenderlo con fósforos
de papel. "Vos dirías que mucha gente se pudo haber ofendido con lo de las fotos en
mi trailer, pero no era mi intensión".
Jolie llegó al set de Inocencia Interrumpida
- un hospital psiquiátrico verdadero y bastante lúgubre, en Harrisburg, Pennsylvania-
después de filmar El Coleccionista de Huesos, donde interpretó a una mujer
policía que pasa mucho tiempo sola en cuevas y mataderos buscando cadáveres. Y en esta
película, de repente, Jolie se encontró haciendo amigos. Pero no fue tan simple,
"con algunas chicas", dice, " no congenié mucho, no sé qué les habrá
pasado a ellas conmigo; pero creo que en un momento todas pensaron que no era muy
simpática."
Jolie se pone "rara" cuando habla de
"Inocencia Interrumpida". Ryder recuerda su experiencia en la película
con cierta distancia, pero Jolie no parece hacer lo mismo, sino que parece perderse en el
pequeño mundo de Lisa. " Un día, pensaron que yo estaba enojada con Winona - que
nos habíamos peleado, y eso nunca pasó, nunca tuvimos ningún problema. Pero tuvimos una
escena donde ella le habla mal de mi a las chicas, y supuestamente yo tengo que reírme de
eso
y para mí, a mi personaje no le tiene que resultar graciosa esa situación,
porque ellas eran mi familia. A veces, la producción pensaba que yo era mala porque
hacía ese tipo de cosas, o porque no le sonreía a Winona o no era graciosa con las
otras actrices. Me acuerdo que se decía que había mala onda en el set, y yo pensaba - y
aquí Jolie se mete en su personaje -"soy una sociópata".
Gracias al personaje de El Coleccionista de
Huesos, Jolie se convirtió en una especialista en ciencia forense. ("No lo
podés evitar", dice, " estás en el baño de la casa de un amigo, y decís, OK,
no quiero parecer paranoica pero juraría que hay un pelo rojo en ese
cepillo
"). En el set de Inocencia Interrumpida, después, "Jolie
- Lisa" solía sentarse cómodamente y estudiaba las personalidades de las
"actrices- internas". "Al haber investigado tanto en "El
Coleccionista...", dice, " después al llegar a esta película
me ví rodeada por toda esta gente y
" - se acomoda en la silla del bar de
cigarros, entrecierra los ojos y enumera todos los defectos de una chica imaginaria en el
medio del bar - "vos usás esa ropa porque tenés un problema de identidad, y estás
intentando sentirte mejor, por eso te vestis de rosa, porque estás deprimida", dice
Jolie riéndose. "Fui totalmente libre, analizaba a todos".
A Brittany Murphy (Ni Idea), que interpreta
a Daisy, una chica con un peinado típico de los 60 "con
las puntas hacia fuera", que vive a dieta estricta de pollo y laxantes, Jolie le dijo
una vez " Tu pelo se va para arriba porque le tiene miedo a tus hombros", dice
Murphy riéndose y repitiendo el comentario. Luego recuerda que Jolie le compró una
mochila para el día de San Valentín ( le compró regalos a todas las chicas), con una
cabeza enorme de Pluto, con las orejas hacia fuera como el peinado de Daisy. "Lisa la
toturaba a Daisy", continua Murphy, "una noche estabamos charlando (con Jolie
fuera de cámara) y Angelina me dijo, "esperá, ¿para qué te estoy
hablando?", dice Murphy riéndose, "y yo le dije, no podemos tener una tregua de
los personajes por un rato?", Jolie sólo se rió dice Murphy; la respuesta
implícita era NO.
"A medida que Jim y yo fuimos conociendo mejor
a las actrices", dice Konrad, nos reíamos y decíamos "Sí, todas están muy
metidas en sus personajes", pero en realidad, ellas son un poco los personajes, por
eso el elenco es tan genial".
Ryder no lo ve así, aunque no le preguntó a Jolie
cuál fue su experiencia durante la película. "Creo que Angelina puso mucho de ella
en este film", dice, "pero no sé, porque no la conozco tan bien. No hablabamos
de eso, ya que nuestros personajes tienen una relación muy extraña. Pero sé que Angie
se conecta mucho con sus personajes, me encantaría algún día hacer una película con
ella donde fueramos amigas íntimas, para llegar a conocerla bien."
Jolie está de acuerdo, Ryder y ella no llegaron a
conocerse mucho, y ninguna de las actrices se atrevió a salir de su personaje para
preguntarle a la otra " ¿cómo estás?"
"En muchas escenas", dice Jolie, "
estabamos peleadas, así que fuera de cámara andabamos cada una por su lado."
También había algo en sus personjes que hacía imposible que Jolie y Ryder se conectaran
socialmente: Jolie había llegado al set pensando que iba a sufrir mucho con la película,
pero para su sorpresa, descubrió que Lisa no sentía nada, absolutamente nada; y Ryder
por otro lado sentía todo.
Murphy cuenta cómo fue su llegada al set, había
habido una gran tormenta de nieve, y su avión fue desviado a Baltimore, donde tuvo que
pasar la noche, antes de llegar a Harrisburg.
A la mañana siguiente, Ryder la estaba esperando en
la oficina de producción: "Esperándome en medio de la nieve", dice Murphy,
" estaba Winona con sus ojos brillantes y un gran abrazo de bienvenida. Esa era la
primera vez que la veía. Me dijo que no había podido dormir en toda la noche sabiendo
que estaba sola en Baltimore, y lo decía en serio".
Elisabeth Moss- 16 años- la actriz más
joven del elenco- también se sintió protegida por Ryder, a quien llama "mi angel
guardián". Moss interpreta a Polly, una adolescente que sufre tanto que se
quema a sí misma para no sentir más. Ryder se hizo muy amiga de Moss, dice la actriz
más joven, de modo que Moss tenía con quien estar entre las tomas, alguien para charlar
cuando los otros estaban trabajando.
Cuando Jolie se iba los viernes a la noche a New
York con otras actrices, Ryder se quedaba en Harrisburg con Moss. " Estabamos todo el
día en el hospital", dice Moss, "todos desaparecían los viernes y aparecían
los lunes a la mañana y nadie preguntaba nada; pero Noni y yo siempre estabamos juntas en
nuestros habitaciones, o ibamos a ver películas al shopping de Harrisburg."
"Yo quería ir a New York", dice Ryder, "sonaba muy divertido, pero me
quedé, podés creer, que me quedé."
Durante la filmación de Inocencia Interrumpida,
Ryder comenzó a dormir menos, y volvió a sufrir ataques de ansiedad . Parte de esto, se
debió a que el hospital, donde se filmaron el 80 por ciento de las escenas, parecía una
cárcel, aunque luciera más bien como el campus de una universidad.
La tercera parte del hospital aún funcionaba
- había un centro de rehabilitación para drogadictos, y una sección para familias sin
techo- y durante los tres meses de filmación, las actrices pudieron conversar con algunas
de las personas de allí. Era imposible terminar una escena y salir del set. "Filmar
en este hospital con gente que estaba sufriendo", dice Ryder, " fue una
experiencia de mucha humildad."
Y también fue desconcertante, ya que se filmó
fuera de secuencia, pero casi siempre en el mismo set: el hospital- de modo que Ryder tuvo
que encontrar una manera de seguir la continuidad (o la falta de ella) de esa montaña
rusa que eran las emociones de Susana durante los dos años en los que transcurre la
historia. Ryder pegó carteles por todo su trailer, que indicaban como se suponía que
debía estar emocionalmente ese día- que era exactamente lo contrario al día anterior o
a la semana pasada- además, miraba tomas todas las noches, y de esa manera recordaba las
escenas que ya había filmado, y con las cuales se tenía que conectar para el día
siguiente.
"Tenía que ser así", dice, "porque
si me desprendía de las emociones al terminar el día, hubiera sido muy extenuante
volverlas a elaborar la mañana siguiente."
Como muchas otras chicas en el set, Ryder se
enfermó durante la filmación, y le dijo al director de fotografía Jack Green
(Los Puentes de Madison, Twister) que entre la gripe y su trabajo
debilitante, a veces se sentía "demasiado frágil". Green recuerda que cuidó
mucho a Ryder, y se hacía el "guardabosque" con los técnicos, asegurándose de
que las interrupciones para el ajuste de luces o retoques de peinado se redujeran al
mínimo. Ryder estuvo tan cómoda con Green , esperando sus abrazos y sus "te
quieros" diarios, que cuando tuvo que filmar una escena de amor con Jared Leto,
que interpreta a su novio, se desnudó debajo de las sábanas- algo que nunca había hecho
antes en un set- segura de que la cámara no tomaría nada demasiado revelador. "Me
sentí tan segura con todos, nadie estaba paranoico", explica Ryder, " en esta
película hice cosas que nunca había hecho antes."
La verdadera Susanna Kaysen, visitó el set
durante un par de días ese invierno, y se dio cuenta de que Ryder- sin importar cuan
enferma, ansiosa o insomne estuviera- era la única que estaba siempre en el set, siempre
trabajando.
Kaysen notó que Ryder llevaba consigo toda la carga
- física, emocional, y creativa- de su propia historia. "Sentí que su exigencia era
tal
ella se exige muchísimo a sí misma", dice la verdadera Susanna riéndose
y recordando cómo se desilusionó Ryder cuando Kaysen vió unas tomas de los actores que
interpretan a los padres de Susanna, y ésta le dijo que no se parecían en nada a sus
verdaderos padres.
La escritora pasó una jornada de 16 horas en el
set, observando cómo Ryder se transformaba en Kaysen con toda la energía posible.
"Yo pensaba, esta mujer es realmente buena, esa fragilidad, que pienso que tiene, se
traduce en un personaje muy flexible, le tengo mucha confianza", dice Kaysen.
La vida de Jolie también se vió interrumpida hace
un par de años. La hija del actor Jon Voight y la actriz Marcheline Bertrand,
se fue de su casa a los 16 años (se mudó a un departamento frente a la casa de su
madre), se casó a los 20 (con mi "segundo hombre ": Jonny Lee Miller, con quien
protagonizó Hackers); y luego a los 22 después de rechazar cuatro veces el
papel, porque sabía instintivamente lo que eso le implicaría, aceptó interpretar a la
modelo autodestructiva que muere de SIDA, Gia Carangi, en la premiada película
de HBO: GIA. Fue durante esa producción que la vida de
Jolie se interrumpió: se mudó a un hotel sin su marido y perdió contacto con todos sus
amigos.
"Lo que pasó fue que me sentí demasiado
expuesta al mismo tiempo que estaba interpretando a alguien que también se estaba
exponiendo", dice, "estaba destruída, sentía que no era una buena persona, me
sentía muy mal". Los recuerdos que tiene de esa época son , en el mejor de los
casos, agridulces...
Después de la filmación de Gia, Jolie
dejó la actuación y se mudó a New York, donde se compró un departamento y se
inscribió en la Facultad de Cine de de la Universidad de Nueva York, Miller se mudó a
Londres, y ya no vivirían más juntos, luego en agosto de 1999 se divorciarían
definitivamente.
Jolie comenzó a extrañar la actuación, y después
de un año decidió regresar a Hollywood para encarnar a una extraña esposa en la
película Pushing Tin, y a una encantadora jovencita en Corazones
Apasionados. "Salí a flote", dice, " y con mucha más fuerza. Ya no
soy tan dura conmigo misma, simplemente no le pido mucho a la gente, sólo que sean ellos
mismos". Jolie sonríe y toma un trago de vino. Eso es lo que ella más desea - ser
ella misma
pero quién es ella? "Todas", dice.
Uno pensaría, al hablar con alguna de las jóvenes
actrices de Inocencia Interrumpida, que Ryder y Jolie inventaron el arte de la
actuación. La admiración es impresionante. Murphy dice que Ryder "cambiaba la
atmósfera" cuando hacían una escena juntas, que no era cuestión de
"actuar" sino de "creer." Moss dice que con Jolie, "uno
estaba constantemente mirando y esperando qué te iba a decir, era
emocionante." Murphy coincide: "Angie es una actriz muy
generosa", dice, y agrega que Jolie le contó algunos consejos que su mamá le había
dado: " Se valiente, atrevida y se libre."
Ni Moss, ni Murphy vivieron "en" el
personaje durante todo el invierno en Pennsylvania. Moss cree que si ella no se hubiera
desprendido de Polly todas las noches después del día de filmación "hubiera
terminado en un manicomio." Murphy también dice que se hubiera vuelto
"loca", pero, estas actrices, a diferencia de Ryder y Jolie, no conocen
exactamente lo que es atravesar períodos mentales oscuros, ya sean pérdidas, noches sin
dormir, ansiedades incontrolables y responsabilidades paralizantes; estas cosas ya les
pasarán a ellas también, pero no todavía, por ahora, están felices de haber
participado en una película femenina emocional, personal y muy intensa.
"Hubiera trabajado tirando cables en esta
película", dice Murphy, "nunca viví nada igual en mi vida, y no sé si alguna
vez me va a volver a pasar".-
|
|